domingo, 8 de noviembre de 2015

Ángel helado

A veces, la vida nos regala momentos en los que nuestros pensamientos se paran, se atascan y no saben cual debería ser la respuesta correcta. El error es creer que esto es el problema, o una mala señal, sin embargo, sin ellos seriamos incapaces de reflexionar y pensar. Paradojas de la vida, ese blanco y en botella que nunca es leche, o el más claro agua que sigue siendo opaco. Como el hecho de explicarle a una niña una canción para piano sobre la inocencia. ¿Qué es la inocencia?¿Acaso ella, en plena facultad y vivencia de ella lo sabe? Ella que más que cualquier adulto siente lo que es la inocencia pues la vive en cada poro de su piel y no la ve, no la comprende.
Algo así siento ahora mismo, pensamientos enroscados, fugaces, intrigantes, angustiados, ansiando la desembocadura en una respuesta clarificante, tranquilizadora. Quizás ese sea uno de los problemas por los que el ser humano se paraliza a la hora de dar respuestas sobre hechos con los que convive a diario, es más, le inundan a diario. Buscamos una respuesta que nos calme, nos salve y nos alivie, sin darnos cuenta que a lo mejor solo encontrar esa respuesta es el peor de nuestros destinos. Quizás sea el error encontrar la calma ante nuestras divagaciones, quizá lo correcto, solo sea la entropía, el caos, el desaliento y la desilusión.
Supongo que siempre he evitado pensar sobre el tema, pero llega un día que se nos planta en la cara, nos mira, con ojos helados de ángel, y nos congela. El amor.
¿Es tan bueno como creemos? ¿es por el contrario lo peor con lo que podríamos cruzarnos? ¿Influye nuestro momento personal para creer en una pregunta o en otra? Me temo que el momento ha llegado, pero se que no será único, no será esta noche, fatídica noche de noviembre, en la que mis pensamientos se resuelvan, se aclaren y descansen. Más bien la oscuridad de la noche solo ha traído el vacío absoluto de quien sabe que anda perdida. 

Dijo Empédocles que el amor y el odio eran el motor del mundo, tras él han pasado infinidad de filósofos, de personas que han buscado el sentido a la vida, tratar de racionalizarlo, sin embargo...creo que a día de hoy nadie ha dado una respuesta mejor. El amor a la vida seguido del odio al amor. Los únicos motores capaces de mover a 7 mil millones de personas, que contienen en sí mismo tanta energía que sin ello, sinceramente, el ser humano no iría a ninguna parte.


 El amor, el odio, siempre tan cerca y tan opuestos, gemelos inseparables, hermanos divorciados...
¿Sinónimos?

martes, 16 de junio de 2015

Imagine

'You may say i'm a dreamer but i'm not the only one.'
Con esta letra el mítico Jonh Lennon en su preciosa canción Imagine, defiende la idea de soñar por encima de todas las cosas, de creer que un lugar mejor es posible, que hay que luchar por lo que uno realmente cree, y que los soñadores, no están solos, sino que todos albergamos en nuestro interior, aunque mínimamente, motivos para soñar.
Desde pequeños nos inculcan fantasías imposibles, ideas utópicas y numerosas películas de artistas viajando por el mundo, parejas que se quieren por encima se sus posibilidades y que lo dan todo el uno por el otro.
Sin embargo, la realidad viene a ser más bien completamente distinta, a la mínima de cambio nos agarramos como un clavo ardiente a la rutina, la comodidad y el tenerlo todo bajo control. Quizás todas esas fantasías de juventud que alimentaron nuestra ilusión ahora solo nos imponen una cosa, miedo. Tenemos miedo a que las cosas salgan bien, nos falta valor de conseguir y de arriesgar por algo que quizás mereciese la pena vivir. ¿Qué recordaremos cuando todo acabe?

Quizás al final de nuestros días solo recordemos esas veces en las que la vida se nos descolocó, cuando el corazón latía a un ritmo distinto, cuando el miedo y la adrenalina de salir de la rutina, de sentirse completamente vivo nos abordó y como las dejamos escapar. Quizà cuando la oscuridad empiece a llenar nuestros días, la luz del sol se apague y la vida vaya a llegar a su fin, ese último deseo, es última ilusión que dejamos escapar brille como una estrella ante nuestros ojos, con el último latido. Porque siempre, antes o despues, nuestros sueños son los únicos que nos mantienen vivos.
Una vez me dijeron, "nunca dejes de soñar" hoy más que nunca entiendo que lo que realmente quiere decir es "nunca dejes de vivir". I'm a dreamer, but I'm  not the only one.

lunes, 23 de marzo de 2015

Tormenta

Quizás las tormentas nos gusten porque así las lágrimas se confunden con gotas de agua golpeando los cristales. El cielo gris y la sensación de nostalgia esta vez es visible en todo lo que te rodea, y no solo en nuestro alma. ¿Quién iba a fijarse en nuestras lágrimas pudiendo contemplar como el cielo llora en primavera? Ese gran espectáculo que se abre ante nuestros ojos y que solo es un reflejo, a lo grande, de lo que llevamos dentro.
Puede que esta sea la causa de que las tormentas, nos gusten más o menos, siempre influyan de manera tan significativa en nuestro estado de ánimo. A algunos les recordará todos los sueños por cumplir, las aspiraciones inconclusas y a otros ese primer beso entre sus brazos. Las tormentas son la excusa perfecta para refugiarnos en el alma de los que nos cuidan.  Pero, si hay algo indudable, es que las tormentas pasan, por suerte o por desgracia, y después siempre viene la calma. O no.

sábado, 21 de marzo de 2015

¿Quién me ha robado la poesía?

Las personas vienen y van constantemente en nuestra vida. Algunas llegan y te aportan una alegría inmensa. Las más especiales te enseñan para qué estás en el mundo, las mas tristes que eres útil para alguien. Todas ellas llenan nuestro corazón de inumerables sensaciones que nos hacen ser una parte de nosotros mismos. Sin embargo, antes o después se marchan y no lo hacen solas, sino que se llevan una parte de lo que somos, y que sin ella seriamos irreconocibles.
Pudiste llevarte mi estúpida sonrisa al verte cruzar la calle, o la ansiedad de mis ojos en busca de un detalle que te haga feliz, incluso mis ganas de soñar a tu lado. Pero con aquella última llamada decidiste llevarte lo único que me sostenía, quizás incoscientemente, mis ganas de soñar. Con aquella última llamada los libros amontonan polvo en mi mesita. Salinas ya no encuentra su voz y Cernuda se olvidó donde habitaba el olvido. En cambio Benedetti aún te quiere y Luis Cuenca no ha vuelto a desayunar entre tus piernas. Incapaz. Incapaz de abrir un solo verso en la inmensa noche, para Neruda más inmensa sin ella. Las yemas de mis dedos en las noches grises acarician la portada de todos aquellos libros ahora prohibidos en luz tenue de la lámpara.Lágrimas que brotan de mis ojos como el rocío en primavera. Incapaz. Métaforas que hieren como puñales, símbolos que paralizan sonrisas, estrofas que rememoran recuerdos, versos que cortan el aire. Suspiros incacabados tras devorar poema tras poema. Incapaz. Los versos se fueron como las oscuras golondrinas de Bécquer, quizás mujer, ya sepas, cuando el amor se olvida a dónde va. Puede que ese amor olvidado repose como el polvo en los versos que no podemos leer. Incapaz. Pudiste llevártelo todo, y sin embargo decidiste llevarte lo que más necesito hoy, la poesía. Incapaz. Por ahora.

jueves, 19 de marzo de 2015

En otra época

Hay veces que simplemente sales de una cafetería con la sensación de haber viajado a otra época. Tu sensacion es completamente nueva, una esperanza renovada, un sentimiento de cálido frescor en el corazón. Sientes tantas cosas que no quieres contarlas, ni siquiera ponerle palabras, ni sonidos, ni saborearlas, tan solo quieres que no pare nunca. Que esa tregua del alma rota perdure lo máximo posible, que en tardes lluviosas se vea el mejor atardecer. Que el abrazo de un amigo no solo recomponga tus pedazos, sino que los suyos complementen los tuyos. Quizás las personas rotas son las que más saben de recomponer.Por un momento solo quieres blindarte ante el mundo, que nada ni nadie pueda entrar en tu pequeña burbuja, burbuja que antes ahogaba y ahora da vida. Ni siquiera quieres saber por que te sientes asi, ni cuanto durara, ni donde lo sientes. Es una sensacion que recorre todo el cuerpo o el alma, o más bien esta aprisionando tu garganta, o bajo el pecho...No lo sabes y no imnporta. Pero que no pare.
La esperanza de encontrar y compartir unos minutos que te devuelven quien eras y quién quieres ser, que te recuerdan que las cosas están jodidas pero también pueden ser bonitas. La vida me ha regalado la oportunidad de aprender escuchando, de llenarme de personas completamente derruidas que siguen manteniendo una incomprensible fortaleza e inconformismo digno de admirar.A veces buscamos la felicidad en los grandes momentos y esta no pasa más allá de un chocolate caliente con la compañía adecuada. En otra época.

jueves, 12 de marzo de 2015

Triste atardecer

 El Principito no respondió.

El atardecer es la perfecta metáfora del fin, de la decadencia y de la muerte de un día, para unos, inolvidables y para otros, olvidadizos. Quizás tenga razón el principito, y los atardeceres nos parecen bonitos cuando estamos tristes, pero qué raro. Buscar la belleza, el alivio de nuestros problemas precisamente en algo, que solo representa la muerte del sol, la llegada de la noche, la oscuridad y el silencio. Ese silencio que a veces ahoga, a veces aprisiona, a veces, solo a veces, mata. Levantamos la mirada al cielo quizás con la mera esperanza de que la inmensidad del firmamento acabe con nuestros humildes, y en comparación, pequeños problemas. Porque somos un poco como el Principito y somos pequeños, inocentes, y no lleguaremos a comprender jamás el mundo que nos rodea. Y habiendo mil flores en el campo, sea nuestra pequeña rosa la que nos consume, la que nos destruye, la que nos entristece.
Levantamos la mirada al firmamento para buscar otra flor que nos sonría, una nube con significado, una respuesta del mundo, para los tristes, siempre desacompasado. Y qué bonito. El cielo se desangra cada día ante nuestros ojos, se vuelve de color fuego igual que ese silencio interior, que nos quema. Como quien abre su corazón por primera vez al mundo, como quien decide arriesgar por un amor imposible, igual que un día se decide luchar por un sueño improbable. Y vemos como las nubes se alargan, se disipan, se pierden, se hunden al igual que nosotros. Y sin embargo,qué bonito. Todo alrededor, con la caída del sol comienza a cambiar, los pájaros vuelan a sus refugios, la gente se encierra en sus casa y la noche inunda el cielo.
Es curioso como el ser humano admira la grandeza de la naturaleza y no es capaz de admirar la suya propia.

 Cada atardecer admiramos la decadencia del sol, incansable, no se cansa de caer, de morir, de quemarse a favor de una inmensa noche, más inmensa sin ella, como diria el poeta.
Cada día estoy más segura que el atardecer es solo el reflejo de los tristes y el firmamento, nuestro espejo. Si cada noche bajasemos la cabeza, y nos vieramos atardecer, veriamos la belleza de nuestras lágrimas, nuestros suspiros frustrados y nuestros retos inalcanzables. Ese amigo que siempre estuvo ahí, salvo cuando lo necesitaste, esa chica que jamás te corresponderá, esa insuperable sensacion de fracaso, de imcomprensión y completo abismo en la que estamos sumergidos día tras día, atardecer tras aterdecer.
 A veces, ver atardecer solo significa encontrar un poquito de esperanza en nosotros mismos, quizás la belleza que observamos ante nuestros ojos es solo la luz que iluminará nuestros sentimientos. Quizás ver atardecer signifique que somos mucho más poderosos de lo que creemos, muchos más fuertes,y por primera vez en el día, mucho más felices. Atardecer significa que cada día estamos mucho más cerca de amanecer, más cerca de descubrir, que la tristeza, no siempre es mala. Que después de la lluvia, todo se ve mucho más claro, y que aun sumidos en la tristeza, se puede descubrir la mayor belleza si sabes cómo mirar.

lunes, 23 de febrero de 2015

Personas abrazo

Personas abrazo.

Posiblemente sea la unión de dos palabras completamente inusuales a la par que dispares. Pero a todos os ha venido el nombre, o más bien, el abrazo de una persona. Y esa persona no es ni vuestro mejor amigo, ni con quien más confianza tenéis, simplemente esa persona es, tu persona abrazo. ¿Y qué es esto? Esa persona que te devuelve el aliento cuando crees estar perdido, cuando  ni siquiera sabes todo lo que te ocurre, y sin embargo consigue que eso pase a un segundo plano, y entrar en un estado de "abrazo". Porque estas personas no tienen que hacerlo continuamente, pero la sensación que producen en nosotros es, sencillamente, la de un abrazo. Un abrazo al alma. La fusión de dos cuerpos dispuestos a protegerse durante esos segundos, de la realidad más hostil que nos rodea, el "estoy aquí aunque no tenga ni idea de como ayudarte". Fundidos en una unión tan íntima como especial. Estas personas, son de las más útiles en nuestra vida, y no hablo de utilidad en el sentido de objeto, sino de apoyo, de cariño, de amor.

Hoy, me he dado cuenta de la importancia de estas personas en la vida, en mi vida, porque a veces dar un abrazo no significa enfrentarse al mundo, sino que el mundo tenga que enfrentarse a nosotros si quiere superarnos, un abrazo es esconder la cabeza en el alma de tu persona abrazo, y desviar la vista de tus objetivos, tus penas o tus metas. Pero para posteriormente alzarla con mayor fuerza y no lo olvidéis, con una sonrisa. Porque no importa ser adulto, niño, extrovertido o el más tímido de la clase. Un abrazo es un momento que todos debemos y necesitamos sentir a lo largo del día. Incluso más de uno, muchos. Y es una pena si un día nos acostamos sin haber dado un abrazo a alguien. Porque los abrazos reconfortan al que lo recibe y a quien lo realiza. ¿Te imaginas ser una persona abrazo? Una persona a la que recurran sabiendo que nunca fallarán, que no es ni la más indicada ni la más preparada, pero hay algo que las distingue de todas las demás, esa persona será la más entregada. ¿Sabéis qué? Tras encontrar a esa persona abrazo, tras vivir un, metafóricamente hablando, momento abrazo, lo único de lo que tienes ganas, es de ser feliz.